A veces eres rudo, no mides tus palabras.
Sé que eres ese tipo de persona.
Sé que lo haces sin querer.
Sé que no quieres dañar a alguien pero...
si sigues sin cambiar, si sigues así...
¿Cómo seguiré estando contigo,
si ni siquiera puedo yo aguantarlo?
Palabras rudas e impenetrables
son las que me responden
y refutan sin dejarme poder decir algo.
Dime, chico... ¿seguirás siendo así?.
Alejas a las personas,
no sé si lo haces a propósito.
Te enojas por tonterías,
aún no eres un chico,
y menos un hombre.
Sigues siendo un niño.
El niño que siempre se siente desprotegido.
Que no confía, ni se fía.
En una burbuja dependes,
pero ni siquiera puedes
mantenerte a ti mismo.
Niño, deja de hacerte el fuerte.
Grita, llora, desahógate,
que nadie se va a burlar...
que nadie te va a molestar...
Sigues siendo un niño,
Carlos.